Marta Oreja, responsable de la ONG
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La salud y la pandemia han obligado a Marta Oreja Bernal a abrir un paréntesis en su labor al frente de la ONG tudelana Supporting Healthcare in Kenya, que desde que la fundó en julio de 2019, permite a 93 niños y niñas de 2 a 12 años beneficiarse de un proyecto educativo, sanitario y de alimentación a través de apadrinamientos.

Tras dar forma e impulsar el proyecto el verano pasado, la profesora tudelana regresó a casa en septiembre con problemas de salud contraídos en Kenia, que le impidieron retomar la normalidad hasta el mes de febrero. Luego en marzo llegó el confinamiento por COVID19, «lo que me ha impedido recaudar fondos activamente y organizar mercadillos solidarios para financiar el proyecto», explica Marta.

El proyecto está aportando comida diaria a los pequeños

No obstante, la ONG ha seguido adelante gracias a los Supporters, madrinas y padrinos que no han fallado al compromiso con la salud, educación y alimentación de los pequeños. Los apadrinamientos de 12€ que ha ido recibiendo mensualmente han servido para hacer frente a la compra de comida, materiales escolares, uniformes y tratamientos médicos que, recuerda Marta, «en Kenia son muy caros».

Las nuevas tecnologías le han permitido mantener un contacto directo con los responsables del proyecto; un matrimonio de profesores que está a cargo de los niños y niñas las 24 horas del día, junto a un grupo de tres madres que se encargan de la cocina y la limpieza del colegio, y uno de los abuelos de los niños, que asume el papel de conserje. Todos reciben un salario digno que les permite vivir con comodidad y no tener que recurrir a la mendicidad, como hacían antes de ser contratados por la ONG.

En Kenia, relata, «el inicio del curso también está siendo complicado. El gobierno obligó a cerrar los colegios y no nos permiten dar clase, pero sí que continuamos dándoles de comer, ya que muchos de los 93 niños apadrinados dependen exclusivamente de la comida diaria que les damos. Es una pena que no permitan abrir los colegios, porque a nivel nacional, muchos niños van a perder el curso». Además, alerta, “son muchas las niñas que están quedando embarazadas, ya que el papel de las escuelas no solo es escolarizar, sino también ofrecer un entorno seguro, sobre todo para ellas».

Marta está enormemente agradecida a los seguidores de la ONG. «La verdad es que se comprometen con muchas iniciativas y campañas, y siempre están ahí, a pie del cañón. Se toman muy en serio los apadrinamientos de sus niños y también me ayudan mucho a continuar recaudando fondos para ellos, como ha ocurrido con la campaña solidaria que hemos puesto en marcha en Ribaforada», señala.

Zapatos solidarios

Ahora, con la «nueva normalidad» y la salud recobrada, la responsable de la ONG ha comenzado a recaudar fondos de nuevo y a conseguir más apadrinamientos a través de una venta solidaria de zapatos. «Una empresa de Ribaforada nos ha hecho una donación de 700 pares de zapatos nuevos, de piel, que estamos vendiendo al precio solidario y simbólico de 12 euros, equivalentes al apadrinamiento de un niño en Kenia durante un mes, que les permite contar con asistencia médica, comida y escolarización», señala.

Garantizar la asistencia sanitaria fue el origen del proyecto emprendido por la ONG

Para ello, el ayuntamiento de la localidad ribera ha puesto a su disposición el almacén municipal, (bajo el centro de día), donde cada sábado, de 17:30 a 19:30 informa sobre la labor que está desarrollando Supporting Healthcare in Kenya, y quien lo desea puede adquirir los zapatos solidarios.

Junto a esta iniciativa, el apoyo que ha encontrado en la localidad ribera la ha llevado a plantearle a cada peña el apadrinamiento de un niño. «12 euros al mes para un grupo de 30 personas no es nada, pero en Kenia puede significar mucho: puede significar la vida. Mi objetivo es seguir consiguiendo padrinos, gente comprometida que permita dar estabilidad al proyecto», una idea que confiesa, le gustaría también impulsar en Tudela, donde está inscrita la ONG.

La meta a largo plazo, adelanta Marta, es adquirir un terreno en la aldea keniata y levantar un nuevo edificio con las instalaciones adecuadas para mantener una escuela, un comedor y una clínica. “Por los niños, lo que haga falta”.

Para más información sobre la ONG, podéis visitar sus redes sociales: www.facebook.com/mamaduke281 y www.instagram.com/supporting.healthcare.in.kenya

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