Este próximo y último fin de semana de agosto y como hecho histórico en la localidad, tenían previsto celebrarse por primera vez en dicho mes las fiestas patronales de Ablitas. Este mismo año se conmemoraba el 50 aniversario de la fundación de la primera peña de amigos de la que formó parte y este mismo año es el primero que disfruta de su ansiada jubilación. Te haces tanta ilusión al comienzo de año que te prometes acudir toda la semana a disfrutar de las mismas , sin que te lo impidan los más de 10.000 km distancia que separan tu actual destino con la localidad que te vio nacer. Lo que no contabas es, con la aparición de un enemigo invisible e inesperado pero cierto y por ahora invencible que aparece de repente en forma de virus, COVID 19 lo llaman.
Llevas más de 30 años sin disfrutar “in situ “de las fiestas, ahora programadas para el mes de agosto con la finalidad de que sea más fácil acudir a ellas todo el que quiera dado el periodo vacacional que en general se disponen por estas fechas. Ni a modo de vídeos ni fotografías las podrá disfrutar este año como venía haciendo en todos los anteriores.
Encontraba más ilusión que confianza en que se pudieran celebrar, lo que le llevo a esperar hasta el último momento para devolver el billete sin cerrar que tenía reservado, anular el alojamiento contratado y a colgar en el armario la camisa bordada conmemorativa para la ocasión que había encargado y enviar por la red social al grupo que había creado para la ocasión junto con los demás componentes de la cincuentona peña un escueto mensaje que tan solo acertó a decir, otro año será.
Pedro J Soto Santos