¿Y por qué no en el centro de Tudela? Me pregunto cada vez que reflexiono sobre la ubicación de nuestra estación de tren. Considero que debe ser una cuestión de sentido común y de progreso y por eso, no entiendo por qué UPN vuelve a generar un conflicto innecesario.
La estación de tren de Tudela está en el centro del debate político. Mientras las y los socialistas apostamos por mantenerla en su ubicación actual, en el centro de la ciudad, el señor Toquero, en su incansable afán por llevar la contraria a los gobiernos liderados por socialistas, defiende una propuesta opuesta: trasladarla a las afueras de nuestra ciudad. Lamentablemente, una vez más, señor Toquero, se equivoca. Su aversión irracional hacia cualquier iniciativa con tintes socialistas le impide ver más allá, y lo que es aún más grave, no parece importarle que su propuesta sea una mala decisión para sus vecinos y vecinas y para su ciudad.
Este no es un simple debate logístico. Estamos hablando del modelo de ciudad que queremos construir. Y aquí no cabe duda de que las diferencias son abismales. Cuando el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Oscar Puente, planteó en septiembre la posibilidad de que la actual estación de Tudela se transformara en una nueva estación de alta velocidad, UPN puso rápidamente en marcha su maquinaria del “no” por sistema, sin analizar y sin evaluar los argumentos. Tampoco justificaron su negativa, algo que sorprende de un dirigente público que debería basar sus decisiones en datos. Por tanto, hablemos de certezas.
El hecho de que la alta velocidad llegue a Tudela ya es un éxito político. Es un éxito político conseguido gracias al diálogo y al buen entendimiento entre gobiernos. No es casual que el tren pare en Tudela, es fruto del trabajo discreto y de la negociación permanente entre ambas administraciones.
¿Y por qué defendemos que la estación se mantenga en el centro? La respuesta es evidente. Su ubicación actual en el centro de Tudela garantiza una accesibilidad cómoda para toda la ciudadanía. Una estación está bien ubicada cuando conecta núcleos de población, facilita el intercambio con otros medios de transporte y asegura un acceso directo al centro de la ciudad. Trasladarla a las afueras no solo complicaría la movilidad de quienes dependen del tren, sino que también aislaría a Tudela de una de sus principales conexiones con el resto del país y de ser motor de desarrollo económico y urbano.
El planteamiento del señor Toquero subestima la importancia de contar con una estación central, accesible, sostenible y bien conectada. Que tenga carácter comarcal y conecte la alta velocidad, con líneas del tren de cercanías y el servicio de autobús.
Pero para ello, consideramos prioritario acompañar el mantenimiento de la estación con una serie de mejoras urbanísticas y de movilidad, como la construcción de un aparcamiento subterráneo para facilitar el acceso de los usuarios, urbanizar el entorno de los edificios de ADIF para revitalizar la zona; el estudio de un paso subterráneo hacia el barrio de la Azucarera para mejorar su conectividad o un plan de movilidad sostenible para fomentar el transporte público y la movilidad activa.
Mantener la estación en el centro permitiría que todos los trenes, tanto regionales como de alta velocidad, compartan el mismo espacio, facilitando servicios combinados y mejorando la conectividad con poblaciones de Zaragoza, Navarra y La Rioja. Además, al estar junto a la estación de autobuses, se extenderían las ventajas de la alta velocidad a localidades sin acceso directo al tren, reduciendo tiempos de viaje, siendo algo muy importante para la Ribera. En cambio, una estación aislada aumentaría el tiempo y las dificultades de desplazamiento.
Por tanto, lejos de facilitar el acceso y mejorar las infraestructuras, trasladar la estación fragmentaría el sistema de transporte y aumentaría la dependencia de vehículos privados, agravando problemas, como la congestión del tráfico y las emisiones CO2.
Descentralizar no es sinónimo de progreso. Toquero defiende su propuesta como una oportunidad de modernizar Tudela argumentando que el traslado de la estación impulsaría un desarrollo urbanístico en el centro. Sin embargo, ésta es una visión cortoplacista. El verdadero progreso no se consigue sacando infraestructuras clave del centro de la ciudad, sino integrándolas en un modelo urbano sostenible y accesible.
Por ello, las y los socialistas defendemos mantener la estación en su ubicación actual. Apostamos por revitalizar el centro aprovechando las infraestructuras existentes, realizando mejoras, como ya he dicho, fomentando el transporte público y evitando la creación de áreas periféricas desconectadas del núcleo urbano. Señor Toquero, si voy a coger un tren quiero poder ir desde mi casa en autobús, bicicleta o andando, en línea con el modelo de ciudad de 20 minutos, por el que apostamos.
Los datos no mienten. No existen casos de éxito en España de estaciones situadas fuera de núcleos urbanos. Ahí están los ejemplos de Antequera, Burgos, Cuenca, Segovia, Villena o Tarragona; esta última seguro que muchas personas de Tudela la conocen bien.
Invito al señor Toquero a revisar las numerosas críticas y titulares de prensa que evidencian el problema. Todos con el mismo denominador común: su lejanía a la ciudad.
Y a todo esto, debemos sumarle el impacto significativo que tendría para la economía local de Tudela trasladar la estación. Los negocios de nuestra ciudad perderían el flujo constante de pasajeros lo que supondría una merma económica importante. Pero el señor Toquero parece no tener en cuenta el impacto económico que a largo plazo una medida así podría tener para una ciudad como Tudela.
Las y los socialistas seguiremos defendiendo un modelo de ciudad conectada, centrado en las personas, accesible y sostenible, frente a la postura obsoleta y cortoplacista del señor Toquero.
Mantener la estación de tren de Tudela en el centro de la ciudad no solo es una cuestión de sentido común, sino de responsabilidad. Una Tudela conectada es una Tudela fuerte, moderna y preparada para el futuro.
Olga Chueca
Portavoz PSN Tudela