Víctor Valverde Planillo es toda una institución en el C.A. Monteagudo, equipo del primer grupo de la Primera Regional de Navarra, donde le han salido los dientes como futbolista. Fiel a sus colores, este joven no ha dudado nunca que su trayectoria deportiva se fraguaría en el equipo de su pueblo, tanto si los resultados acompañaban como si eran adversos. Y es que este chaval está hecho de otra pasta, de esa pasta cuyos ingredientes están basados en disfrutar del fútbol, del deporte al que ama, junto a sus amigos y bajo el paraguas del C.A. Monteagudo.
Jugador polivalente que lo mismo arregla un roto que un descosido, Víctor Valverde Planillo ha ocupado todas las demarcaciones del equipo cuando ha hecho falta, incluso hasta de portero. En la actualidad juega de delantero, y las cosas no le salen mal. Es más, se defiende muy bien y demuestra a la cantera cuál debe ser la verdadera filosofía del fútbol y del deporte en general, y que no es otra que la de ser humildes, tener valores deportivos y humanos, darlo todo en cada entrenamiento y en cada partido, asumir las indicaciones del entrenador sin rechistar y, sobre todo, disfrutar.
Esta temporada 2024-2025 está siendo muy especial para Víctor, quien se deshace en elogios tanto hacia la plantilla, sus compañeros, como hacia el cuerpo técnico, la directiva y su afición. «Todo está siendo muy bonito, de verdad, estamos viviendo un momento muy bueno», asegura. En este sentido, también destaca las virtudes del campo de fútbol San Francisco Javier. «Tenemos unas instalaciones sencillas, pero muy bonitas y acogedoras», asegura.
Respecto a la Primera Regional de esta campaña, no duda en reconocer que está siendo competitiva y, en cuanto a las aspiraciones del C.A. Monteagudo, vuelve a insistir en que lo importante es «disfrutar sin renunciar a nada».
Al proponerle que haga una radiografía de la plantilla de su equipo, esboza una sonrisa, su peculiar sonrisa con la que expresa todo, y se muestra convencido de las virtudes que tiene en cada una de sus líneas, una portería solida, una defensa contundente y segura, un centro del campo creativo y un ataque que intenta aprovechar las ocasiones que se presentan.
En el aspecto personal, tiene palabras de cariño hacia su padre Jesús, que siempre le apoya no solo en lo deportivo, sino especialmente en lo personal, y también recuerda a su primo Borja Martínez, de Ablitas, al que se siente muy unido y dice a los cuatro vientos que «lo quiero».
Este es Víctor Valverde Planillo, un chaval que, sin duda alguna, es un ejemplo en valores y lealtad, en una sociedad que cada día valora más lo material frente a lo humano.