En estas fechas recientes de Semana Santa y, como es costumbre, en los grupos de Alemán del IES Valle del Ebro se decoran y pintan los huevos de Pascua, siguiendo la tradición de la cultura alemana.

Esta costumbre, asociada a la festividad de la Pascua cristiana, es de orígenes remotos e inciertos. Según algunas teorías, el uso de colorear los huevos viene del este de Europa donde en época precristiana se pintaban los huevos para agradecer la llegada del sol y el calor en la primavera.

Para motivar al alumnado, el pasado 18 de abril se programó una salida a la cercana población de Cortes donde amablemente los recibió Inés Litago, vecina de la villa ribera que se dedica, desde hace más de una década, a decorar huevos de avestruz.

El alumnado se mostró muy interesado en todo momento y manifestó su sorpresa ante la colección de más de ochocientos huevos pintados que Inés tiene en su casa. Este particular museo, por cierto, se ha convertido en el único en Europa de esta original categoría.