Corella se encuentra inmersa en una cuenta atrás decisiva. Tras años de trabajo para ordenar su comunal y preparar su incorporación a la segunda fase del Canal de Navarra, el Ayuntamiento ha logrado un importante consenso político que refuerza esta apuesta de futuro. En el último pleno municipal se aprobó, con los votos favorables de ACI, UPN y PSN y la única oposición del PP, el acuerdo que establece las bases para las transacciones de tierras regables, paso imprescindible antes de la votación del 29 de mayo.
El concejal de Agricultura, Félix Bienzobas, no oculta la trascendencia del momento. “Es un avance muy importante. Ningún grupo político presente en el ayuntamiento de Corella discute el carácter comunal de la tierra, lo cual es una evolución transcendental respecto a donde estábamos en 2020. Ahora el debate está en cómo hacerlo, no en si hay que hacerlo”.
El acuerdo aprobado articula un sistema flexible con cuatro alternativas para facilitar la incorporación de los propietarios al nuevo modelo de regadío. Todas ellas giran en torno al reparto 60-40, por el cual el comunal de Corella se quedaría con el 40% de la tierra y el agricultor con el 60%. “Es el modelo clásico aceptado por el Gobierno de Navarra, pero lo importante es que se ha conseguido diseñar opciones que sean lo menos lesivas posibles para los propietarios”, explica Bienzobas.
Cuatro alternativas para una transición pactada
La primera opción es la transacción simple: el propietario cede el 40% de su parcela que pasa a comunal del Ayuntamiento. De esta forma queda su patrimonio regularizado y con el 60% que le queda puede seguir explotándolo o venderlo. “Si se decide por vender, con la actual perspectiva, una tierra que hasta ahora no tenía valor o era difícil de vender, está alcanzando valores interesantes. En el caso que quiera seguir explotándola como regadío, le agruparan el 60% con el resto de las tierras que tenga, convirtiendo su propiedad en una parcela agrícola y económicamente rentable”, apunta el concejal.
La segunda alternativa está pensada para quienes quieren seguir cultivando la tierra, tanto la que le queda de la transacción, es decir el 60%, pero también puede seguir explotando el 40% que cede al comunal. “Si eres agricultor y quieres seguir explotando el 40% cedido a comunal, tiene derecho preferencial para hacerlo durante 15 años, pagando un canon, que será un precio cercano a la amortización anual que haya que soportar por la infraestructura instalada. El canon será calculado sobre una inversión que está subvencionada por ser municipal la tierra al 50%, mientas que la subvención a un particular es de un 25%, así que será más rentable explotar una finca del comunal en regadío que una parcela privada”. En este caso el agricultor explotaría sus fincas asignadas y una parcela comunal de las asignada al Ayuntamiento.
Tercera y cuarta via
Una tercera vía permite mantener la explotación en la misma finca. “Se divide físicamente la parcela: 40% para el comunal y 60% para el agricultor, pero el derecho de uso prioritario lo mantiene la persona que transacciona y el canon se calcula igual que en el caso anterior”, detalla Bienzobas.
La cuarta opción contempla casos especiales, como terrenos con infraestructuras. En todos los casos, insiste el edil, “no se pierde el derecho preferente a explotar.
“Nos jugamos el agua y el futuro agrícola de Corella”
La propuesta municipal sobre el Canal de Navarra en Corella ha comenzado a recibir el respaldo de los propietarios. “Muchas personas están ingresándose por la regularización la propiedad de sus tierras, en unos casos vendiendo y en otros comprados para ampliar su propiedad, está siendo sencillo avanzar. Tenemos cinco polígonos en Montes de Cierzo donde existe conflicto, y en todos se han ido encontrando salidas. Estamos hablando de un proceso muy trabajado”, afirma Bienzobas.
29 de mayo, jornada clave
La votación del próximo 29 de mayo sobre el Canal de Navarra en Corella será clave. Para que prospere, no se necesita el voto de la mayoría de asistentes, sino de la mayoría de superficie representada. “No basta con el 51% de las personas que acudan a la asamblea; se necesita el 51% de la tierra gestionada por la Comunidad de Regantes. Y muchas veces estamos hablando de parcelas muy pequeñas sin derecho a voto si no se agrupan, parcelas heredadas, con muchos titulares. Es una asamblea compleja, pero la vamos a conseguir. No me cabe ninguna duda”, asegura con determinación.
Para garantizar la legalidad del proceso, la Comunidad de Regantes y el Ayuntamiento han desplegado una intensa campaña de notificación. “hay que ir casa por casa, entregando la convocatoria, con la firma del recibí del titular. Hay unas 10 personas recorriendo Corella para que nadie se quede sin ser notificado”, explica el concejal.
La decisión no es menor. “La ciudad de Corella, en el tema agrícola, o entra en el Canal de Navarra o nos tenemos que despedir del agua y de muchas otras cosas. O tomamos la decisión de renunciar, en el caso de los comunales ( del total de las 3.700ha. regulables 1.200ha son comunales conflictivos) a ese 40% a cambio de que llegue el agua, o no renunciamos y no llegará el agua. Esa es la disyuntiva”, sentencia.
Una oportunidad histórica
Bienzobas destaca la ventaja que lleva Corella frente a otros municipios con problemáticas similares. “En el reparto de los comunales de Montes de Cierzo y Argenzón hay siete localidades afectadas por el reparto de las tierras, Tudela y Cascante lo resolvieron cuando se hizo el reparto, pero los otros cinco municipios lo tendrán que resolver en algún momento. Nosotros llevamos años trabajando, y creemos que hay una concienciación en Corella que nos coloca por delante. No puede ocurrir nunca más lo ocurrido en intento de concentración parcelaria en Abatores, un proceso que se fue al traste hace 30 años porque nadie se implicó lo suficiente en sacar adelante un gran proyecto agrícola para Fitero, Cintruénigo y Corella, todo por culpa de la propiedad de los comunales”.
Pese a reconocer que para algunos propietarios “puede suponer un acto de injusticia tener que ceder un 40% de algo que consideran suyo”, el concejal insiste en la importancia del objetivo común. “El día 29 hay que decir sí al agua, sí al canal. Y ya resolveremos después lo que haya que resolver. Lo importante es no perder el tren”.