[ihc-hide-content ihc_mb_type=»show» ihc_mb_who=»4,5,6,7,8,9″ ihc_mb_template=»2″]La Confederación Hidrográfica del Ebro, organismo autónomo, adscrito al Ministerio para la Transición Ecológica (MITECO), ha iniciado la instalación de compuertas flotantes en las zonas cercanas a las confluencias en el río Ebro del río Queiles y del barranco Mediavilla, en Tudela (Navarra), que se prolongará aproximadamente una semana . La intervención prevé reducir la presión sobre estos cauces y por ende sobre el casco urbano de la localidad en situación de crecida circulante por el Ebro. La actuación global supone una inversión total de 574.000 euros.
En concreto se están colocando dos compuertas en el cauce del río Queiles al final de la sección encauzada junto al embarcadero y una compuerta en el barranco Mediavilla. Estas compuertas están diseñadas para flotar, elevándose, con caudales altos en el Ebro, cuando el agua alcance su ubicación, evitando que el agua del río principal entre en los dos cauces. Sin embargo, en situación de niveles bajos y medios del río Ebro las compuertas permanecen abatidas, sin ofrecer resistencia al desagüe de los caudales afluentes por el Queiles y barranco Mediavilla.
La instalación de compuertas completa la intervención realizada dentro de las actuaciones de emergencias por las crecidas extraordinarias en el tramo medio del Ebro de abril de 2018 para la mejora de la seguridad del núcleo de Tudela.
Acciones en el tramo medio
En las cuencas afectadas por el episodio del pasado año (tramo medio del Ebro, Jalón y cuenca de los Arbas) se definieron actuaciones diversas para minorar el riesgo de inundación de forma compatible, además con las normativas medioambientales: la reparación de defensas, la mejora de la capacidad de desagüe de los cauces y ampliación del espacio fluvial, la permeabilización de infraestructuras, la creación de zonas de inundabilidad o la aplicación de intervenciones novedosas como los denominados curages (permeabilización de masas vegetadas de sedimentos mediante la apertura de ramales de libre circulación) VER VÍDEO EXPLICATIVO DE LAS ACTUACIONES CICLANDO AQUÍ
La filosofía de estas intervenciones, que recoge acciones puestas en marcha ya tras el episodio también extraordinario de 2015, regirá el futuro proyecto Ebro Resilience que coordinan MITECO y la CHE con las Comunidades Autónomas de Navarra, La Rioja y Aragón y que define actuaciones para minorar los daños por inundación en el tramo medio del Ebro.
Tras una fase de participación y con el desarrollo en paralelo de un proyecto referente que ha servido como piloto de estas intervenciones, la restauración fluvial del Arga en Funes (Navarra), actualmente se están desarrollando estudios en detalle en trece tramos, doce desarrollados por la CHE: Ebro en Logroño – Viana; Ebro en Pradilla de Ebro – Boquiñeni; Ebro y Huecha en Mallén – Cortes – Novillas; Ebro en Pina de Ebro – Quinto; Ebro en Cabañas de Ebro; Ebro en Utebo – Monzalbarba – Alfocea; Ebro en Alcalá de Ebro; Ebro en Torres de Berrellén – Sobradiel; Ebro en Fontellas – Cabanillas – Ribaforada – Fustiñana – Buñuel; Ebro y Ega en San Adrián – Calahorra – Azagra; Ebro en Lodosa; Ebro en Zaragoza – Pastriz y por último, uno definido por la Comunidad Foral de Navarra: Ebro Castejón-Tudela.
Además se realizará un estudio de adaptación al riesgo de inundación de 100 explotaciones agrícolas y/o ganaderas en todo el tramo medio del Ebro. Para ello se trabaja en coordinación con Ayuntamientos y las Comunidades Autónomas proponiendo las explotaciones a estudiar.[/ihc-hide-content]