Fernando Mendoza
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El director gerente de Nilsa, Fernando Mendoza, ha reprochado al alcalde de Tudela, Alejandro Toquero, su “irresponsabilidad” por generar una “falsa alarma” y “jugar con el miedo” de los tudelanos y las tudelanas al referirse a la planta centralizada de fangos y a la ampliación de la Estación Depuradora de Aguas Residuales como “una amenaza”.

Mendoza ha lamentado las palabras de Toquero “instalado en la desinformación” y la “confrontación” constante, “obviando la realidad y buscando únicamente el rédito político sin pensar en el daño que puede causar a la ciudadanía tudelana”.

El director gerente de Nilsa ha contextualizado las actuaciones previstas en Tudela y ha recordado que está prevista una inversión de 24 millones de euros, con el apoyo del Ministerio de Transición Ecológica y que aportará el equivalente a 600.000 euros de abono gratis para los agricultores y agricultoras de la comarca. “Estamos hablando de una infraestructura similar a la ubicada en Arazuri y que da servicio a la Comarca de Pamplona desde hace treinta años”.

El responsable de Nilsa ha recordado que “actualmente estamos en proceso de resolución de las alegaciones. Será la CHE quien las resuelva y sin duda lo hará con rigor”. Mientras tanto, “Nilsa respetará, como no puede ser de otra manera, sus decisiones, e informará de todo lo que se le requiera”. Esta es la realidad, ha insistido Mendoza, “no la realidad absolutamente infundada que se empeña en transmitir Toquero”.

Mendoza ha defendido que la ampliación y actualización de la depuradora es necesaria y está fundamentada en cuestiones técnicas y medioambientales. El objetivo es tratar los lodos como se hace en Arazuri. “Es un proyecto maduro, que potencia la economía circular, dinamiza la zona y la agricultura, y permite una gestión totalmente pública de un recurso que ahora se trata como un desecho y se paga a un gestor en Pina del Ebro”.

Los estudios que maneja Nilsa, ha argumentado Mendoza, “han demostrado que los lodos no llevan metales pesados”. Además, “no se van a producir mayores concentraciones de fósforo ni de nitratos y la obtención de biogás es completamente segura y persigue la economía circular y ser una fuente de energía limpia, que además no tienen un interés lucrativo ya que los beneficios que se generen se destinarán como ingresos al Plan Director del Agua”.

Por su parte, ha concluido Mendoza, “la depuradora sigue siendo depuradora, su actividad no cambia al ser una planta de biogás, sino que se complementa y de manera muy subsidiaria, igual que sucede en la depuradora de Arazuri”.

En este contexto, el director gerente de Nilsa exige al alcalde de Tudela “rigor” y que evite crear un alarmismo dañino que lo único que consigue es perjudicar el bienestar, la convivencia, el desarrollo y la tranquilidad de la ciudadanía de Tudela.