El gimnasio Shogun es toda una institución en Tudela. Fundado en 1978, comenzó centrado en las artes marciales —judo y kárate—, pero pronto amplió su oferta con la gimnasia rítmica, una disciplina que sigue siendo hoy uno de sus pilares. Desde entonces, el Shogun ha crecido hasta convertirse en un gimnasio referente en la Ribera, con más de 1.200 metros cuadrados de instalaciones repartidos en cuatro plantas, con tres amplias salas de entrenamiento de unos 200 metros cuadrados, sala de musculación, sauna y jacuzzi. Así mismo, ha crecido su oferta de actividades, incorporando defensa personal infantil y juvenil, defensa personal de adultos, aerobic, aerobic infantil, hip hop, y biogimnasia o gimnasia de mantenimiento.
Al frente del Shogun está Félix Pastor, profesor de judo del gimnasio tudelano desde hace 35 años. “Mi primer profesor fue Raúl Delgado, el fundador del gimnasio”, recuerda Pastor. “Empecé con 12 años y llevo desde 1990 como profesor. Al final, el Shogun es mi casa”.
Un gimnasio familiar y cercano
Más que un gimnasio, el Shogun se define como una gran familia. Su equipo lo forman siete profesores y monitores, algunos con más de tres décadas de experiencia. “Esto no somos un macrogimnasio donde todo es impersonal. Nos conocemos, cuidamos el ambiente y queremos que todos los socios se sientan a gusto”, explica Pastor.
Para fomentar ese espíritu, el Shogun organiza actividades especiales como la “semana del amigo”, en la que los socios pueden invitar a entrenar a una persona gratuitamente durante una semana, o la “semana de los padres”, que permite a las familias compartir la experiencia de entrenamiento de sus hijos.
Judo, kárate y gimnasia rítmica, los pilares del Shogun
El judo y la gimnasia rítmica son los grandes emblemas del centro. En judo, las clases están muy estructuradas por edades y niveles, con ratios cuidados que permiten una atención personalizada. “En judo solemos tener unos 20 niños por grupo, y cuando el número crece, reforzamos con otro profesor o dividimos grupos. No queremos masificar”, comenta Félix Pastor.
La gimnasia rítmica, por su parte, reúne a unas 20 niñas por clase y mantiene un alto nivel técnico y de participación, consolidándose como una de las actividades más demandadas del gimnasio.
Defensa personal y nuevas disciplinas
Otra de las áreas en crecimiento es la defensa personal infantil y juvenil, nacida como respuesta a la preocupación por el acoso escolar. “Empezamos con cuatro niños hace años y hoy tenemos unos 40 entre defensa personal infantil y juvenil”, explica Pastor. También se imparten clases específicas de defensa personal para adultos, además de kárate, aerobic, y biogimnasia.
Tradición y renovación constante
El Shogun mantiene el equilibrio entre su larga trayectoria y su espíritu innovador. “Tenemos tres salas de 200 metros cuadrados cada una, podríamos meter mucha gente, pero preferimos no hacerlo. Queremos calidad, no cantidad”, resume Félix Pastor.
Más de cuatro décadas después de su fundación, el gimnasio Shogun sigue siendo un referente del deporte y la convivencia en Tudela, un lugar donde generaciones enteras han crecido entre tatamis, esfuerzo, deporte y amistad.
El impulso al hip hop: nuevas alumnas bienvenidas
Entre las actividades más recientes, el gimnasio está apostando con fuerza por el hip hop, una disciplina que combina música, ritmo y expresión corporal. Las clases están dirigidas por Lola, profesora con 15 años de experiencia, que también imparte pilates y aeróbic.
“Las clases de hip hop son muy dinámicas, abiertas a niñas y niños de entre 6 y 15 años, y a final de curso se hace una exhibición”, explica Félix. Además, en este momento, quienes estén interesados pueden probar esta disciplina de forma gratuita durante dos semanas.