El alcalde de Buñuel, Enrique Villafranca, ha presentado su dimisión por registro en el Ayuntamiento, cumpliendo así el acuerdo de investidura alcanzado en 2023 entre su agrupación, Buñuel Independiente, y UPN. El pacto preveía repartir la Alcaldía dos años cada uno, aunque los regionalistas abandonaron el equipo de gobierno el pasado mes de abril.
Villafranca ha asegurado que deja el cargo «satisfecho con el trabajo realizado» y ha lamentado que «el politiqueo infecte también a los ayuntamientos de pueblos pequeños, que deberían mirar más por los vecinos y menos por las estrategias partidistas».
Trabajo en minoría
Durante estos dos años, Buñuel Independiente ha gestionado el ayuntamiento con Enrique Villafranca y Raúl Becerra. El ya exalcalde ha agradecido el “enorme esfuerzo” de su compañero, cuyo compromiso, ha dicho, “solo es igualable al amor por su pueblo”.
Pese a gobernar sin mayoría, el equipo de gobierno logró aprobar los presupuestos municipales y, recientemente, una modificación presupuestaria que incluía las inversiones iniciales bloqueadas en abril.
Villafranca ha explicado que su renuncia ha sido «consensuada con Raúl y con el grupo de vecinos que conformamos Buñuel Independiente». Ha remarcado que no quieren «utilizar un acto de transfuguismo como excusa para mantenernos en la Alcaldía», más aún cuando UPN no ha solicitado recuperar la vara de mando.
«Lo que pase a partir de ahora será responsabilidad de quienes han roto sus compromisos»
El exalcalde también ha recordado que hace apenas un mes ofreció repartir delegaciones y cargos de representación con el resto de grupos municipales, en un intento de compartir responsabilidades en un pleno sin mayorías. “Ningún partido aceptó. Por eso, lo que pase a partir de ahora será responsabilidad de quienes han roto sus compromisos”, ha sentenciado.
“Yo no voy a entrar a eso. Llegué para trabajar por mi pueblo y no para agarrarme a ningún sillón. Toca seguir aportando por Buñuel, esta vez desde la oposición y no desde la Alcaldía”, ha concluido.
